Un verdadero líder

Una buena iniciativa creativa, saber resolver problemas, hábitos positivos en lo personal como en la profesional, son solo algunas de las cualidades que identifican a un líder potencial.
Sin importar tu cargo o posición cualquiera puede llegar a ser un buen líder. Hay que identificar y conocer lo que te apasiona, valores. Una vez que lo tengamos, solo es cuestión de sacar a relucir estos aspectos.
El liderazgo no es un cargo o una cualidad de minorías, es aprender, competir, trabajar, ser humilde y saber actuar en el momento adecuado.
El poder de un líder no recae en su jerarquía organizacional, ni por su investidura legal. No es asunto de cargos, nombramientos o títulos. Ni en metodologías o algún tipo de herramientas. Tampoco es una fuerza o un estatus que se puede otorgar. Se centra mas que nada en la personalidad, en el carácter, en la habilidad. En la capacidad de resolver retos y desafíos. De ver afrontar, descifrar y transformar la realidad.

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Como desarrollar el liderazgo
Cualquiera que posee lo antes mencionado puede llegar a ser un buen líder. Solo se requiere de desarrollar estas habilidades. Actuar con pasión con optimismo. Motivar y valorar a la gente que nos rodea, demostrar honestidad, coraje, perseverancia, lealtad, humildad.
Hay que saber escuchar, ser honesto, y no alardear son razones suficientes que hacen que la gente crea en nosotros dan confianza duradera y real y se establecen relaciones estables en nuestro entorno.
La toma de decisiones necesarias en el momento preciso y llevarlas a cabo tras consultar al equipo, sin dejar de lado la participación de todos los involucrados para que se crea una mejor motivación.
Saber exactamente lo que se quiere es un punto esencial para poder guiar al equipo. De igual manera el saber manejar y administrar el tiempo nos dará la confianza para emprender proyectos y a saber cuándo y dónde presentarlos.

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La visión del líder
Para un verdadero líder la visón es fundamental. Es la capacidad de llevar esa visión en una realidad. Saber usar el poder para generar influencia para conseguir los resultados trazados. Utilizar esta energía positiva para llegar a los objetivos estipulados
Sin una visón real el proyecto se estanca. Se necesita ese poder de liderazgo para emprender y continuar con las acciones en la dirección correcta. Una visión bien planteada inspira, energiza, motiva y moviliza todos los recursos tanto del líder como del grupo para llegar a ese fin.
Hay que ser muy claro en el objetivo que se desea alcanzar. Dar un mensaje claro que trasmita emotividad. Ser cortes, optimista, convincente en lo que se dice y plantea. Esto aunado a la sencillez tanto en el lenguaje utilizado en el contenido de los mensajes transmitidos, como en la forma de tratar al resto del grupo.
De esta manera, como responsable de la empresa o proyecto, el líder tiene que tener muy clara esa visión para alcanzarla y llevarla a cabo, inspirando a los demás a llegar a los objetivos propuestos. Haciendo que su imagen de liderazgo se afiance, expanda y fortalezca.
Fuente De Gerencia, Como ser un buen líder, Forbes México

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